POLO
Capturar a los maestros del polo argentino y sus ágiles caballos a través de la fotografía en tintype en Son Ginard fue una experiencia inmersiva y profundamente gratificante. El mundo del polo, donde la fuerza se encuentra con la precisión y la tradición se fusiona con el atletismo más puro, ofreció un sujeto fascinante para este proceso fotográfico histórico.
Tomar estas imágenes a mediados de agosto presentó desafíos únicos. El calor implacable, la intensidad de la luz mediterránea y la delicada naturaleza de los químicos exigían una precisión absoluta y una paciencia extrema. El tiempo se convirtió en el eje central del proceso: cada paso de la técnica del colodión húmedo debía ejecutarse con exactitud, cada exposición calculada meticulosamente. A pesar de estas condiciones, los caballos se mantuvieron sorprendentemente inmóviles, su presencia disciplinada y majestuosa reflejando la gracia y el control de sus jinetes.
Este proyecto trascendió la simple creación de retratos; se convirtió en un diálogo entre el movimiento y la quietud, entre lo efímero y lo eterno. Las imperfecciones orgánicas del tintype, sus texturas impredecibles y el juego entre la plata y la sombra evocaban el espíritu mismo del polo: una combinación de elegancia y naturaleza indómita.
Al final, estas imágenes no solo hablan del deporte, sino también de la conexión silenciosa entre jinete y caballo, del dominio de una técnica y de la belleza de capturar un instante fugaz en un medio que lo convierte en eterno.





























